La web personal me ha hecho re-pensar en la accessibilidad
He desarrollado software (apps en android principalmente) por más de cinco años, pero he consumido un amplio rango de software que incluyen web, webapps, apps nativas o embebidas. Muchas de estas soluciones digitales son desarrolladas con las mejores y últimas tecnologías.
Sin embargo, hace dos años obtuve un feedback sobre un bug que había sido encontrado en un formulario de varios campos de texto. Al desarrollar principalmente en dispositivos con pantalla táctil, no había problema al usar el teclado virtual cuando un campo tenía el foco, incluso, se configura un ImeAction para cambiar el comportamiento del foco y pasarlo al siguiente campo.
Tuve una reunión con el equipo de QA, observaron lo siguiente: Qué ocurre con el formulario cuando existe un dispositivo que no tiene pantalla táctil? cuál es el comportamiento del foco en esos campos de texto cuando no existe un teclado digital?. Nunca había pensado en esas observaciones, pero lo primero que se vino a mi mente fue accesibilidad.
Después de haber solucionado el bug y a partir de esta anécdota, he tratado de seguir las mejores prácticas que involucren la accesibilidad, particularmente la visual.
Recientemente encontré un sitio web que describe como las personas con dificultad visual ven los colores en la web. Me resultó bastante interesante e impactante como ciertos colores y combinaciones afectan la presentación del contenido ante personas con dificultades visuales.
En estos últimos años nos hemos centrado en desarrollar y lanzar productos a una sección social que impulsa la inclusión y los colores. Pero que hay de aquellos que han estado siempre ahí? aquellos que a veces ignoramos por tener cualidades diferentes y que buscan tener voz en este mundo. Qué podemos ofrecer a ellos?
Una web o una app colorida o muy interactiva no es sinónimo accesibilidad.